viernes, 24 de julio de 2009

Carbones y cenizas…

Medio estado está ardiendo, arde el suelo y se queman los corazones de las gentes afectadas, muertos, miedo y desesperación…
Afortunadamente no está Doña Malena para decir que los habitantes de las zonas desbastadas están enfermos…
Dolidos y heridos si están… y a mi sólo me queda ser solidaria con su dolor.
Viene a mi mente mi tierra, que de fuegos sabemos, de horrores, de ataques y desprecios también.
Galicia en 2005 ha tenido un verano de llamas, inquietudes y barbarie… la locura, el mimetismo y quizás la descoordinación en la extinción. No ha sido el único año de oleadas de incendios, pero sí, el que más inquietud han creado, el fuego estaba en puntos muy estratégicos, cerca de vías de comunicación y núcleos de población. No ha sido el año que más hectáreas han ardido, pero sí dónde más corazones desesperados y muertes ha habido.
Los políticos una vez más no han estado a la altura… han estado en la foto, incluso con manguera de jardín en mano… pero ha sido la gente de bien la que ha estado al pié del cañón. Recuerdo a bomberos voluntarios de todos los puntos del país trabajando codo a codo con el paisanaje y los técnicos gallegos.
Mientras la gente trabajaba, los políticos se ocupaban en dialécticas chorras y demagógicas.
A los pirómanos hay que detenerlos y ponerlos en manos de especialistas.
A los resentidos y amargados que queman la naturaleza por no quemarse ellos que se pudran en la cárcel.
A los gestores inoperantes e interesados, señores, pedirle responsabilidades ahora y echarlos fuera en las próximas elecciones.
Y por pedir… también podemos llamar a la lluvia y que cesen los vientos…