Sábado... 27 de Diciembre

El día está gris, y parece que amenaza nieve, si no es aquí, caerá cerca.
Que la meteorología traiga lo que quiera, pero que sea con calma y que nadie sufra gravemente sus consecuencias… si ha de nevar, que nieve… “año de nieves, año de bienes”, eso dice el refrán.
El frío del alma, es bastante peor, y a ese no hay sol de Agosto que lo caliente.
Pero hoy sé, que una familia está feliz, tiene en casa a uno de sus miembros, que por situaciones de la vida lo ha alejado del hogar… pero las distancias cada día se hacen más cortas y llegará el momento en que sean solo puntos de encuentro.
Estoy convencida que Victor es una víctima más del sistema, que no siempre es justo… es cierto, ha cometido un error, ir a demasiada velocidad… pero ya ha aprendido, y ha sufrido, y mucho, por ello.
Afortunadamente él se lo ha tomado como tenía que tomárselo, simplemente como una pausa de su vida en la calle, porque la libertad de pensamiento no nos la puede sacar nadie.
Pero… pienso tantas veces en su madre… y no puedo evitar la tristeza y sentir piedad por ella… afortunadamente las cosas van cambiando para bien poco a poco… y el final de túnel cada día está más cerca.
Hay más alegrías… ver feliz a la gente que quiero, tener a dos sapitos que hacen magia para hacer feliz a una princesa que dicen que es suya, tropezarte con viej@s conocid@s y pasar el tropiezo a un verdadero encuentro y quizás habrá muchas más cosas que endulcen mi hoy… el día apenas está en su ecuador.
De entrada estoy aquí, sintiendo ganas de deciros que estoy contenta… si acontecen más cosas buenas a destacar ya os lo contaré.